La dieta mediterranea

¿Sabes qué es realmente la dieta mediterránea?No es un régimen ni un programa dietético específico. Es una filosofía de vida basada en costumbres milenarias de los habitantes de la cuenca Mediterránea. Hace mucho tiempo los habitantes de la isla griega de Creta descubrieron las ventajas de este tipo de alimentación basada en los productos de la zona y a día de hoy los cretenses, tienen una de las mayores esperanzas de vida de Europa, hecho que los nutricionistas atribuyen a esta dieta.

Decálogo de la Dieta MediterráneaPara llevar un estilo de vida saludable es imprescindible seguir una pautas:
- Utilizar aceite de oliva
- Consumir diariamente verduras y frutas frescas, legumbres y frutos secos.
- Tomar a diario pan y alimentos procedentes de cereales.
- Evitar en lo posible los alimentos procesados.
- Tomar diariamente productos lácteos, principalmente yogur y quesos.
- La carne roja, carnes procesadas y huevos deben tomarse con moderación.
- Comer con frecuencia todo tipo de pescados.
- Como opción preferente sobre otros postres tomar fruta fresca y sólo en ocasiones especiales permitirse tomar dulces, pasteles y postres lácteos.
- Beber agua en abundancia y una o dos copas de vino para acompañar las comidas.
- Muy importante realizar alguna actividad física todos los días , casi tanto como comer adecuademante

Beneficios
Eleva niveles de vitamina C, E, beta-caróteno, polifenoles y otros antioxidantes.
Disminuye el colesterol total y el colesterol LDL, el “malo” y aumenta el colesterol HDL, el “bueno”
Refuerza el sistema inmune. Porque mantiene un equilibrio de los mecanismos de defensa del individuo y disminuye reacciones inflamatorias.
La fibra de cereales, leguminosas, verduras y frutas previenen el estreñimiento y la enfermedad diverticular.
El aceite de oliva y los frutos secos se asocian a un efecto cardioprotector.
Su contenido en sodio, potasio y fibra, ayudan a disminuir la presión arterial.

Propiedades de los alimentosEl aceite de oliva: rica en grasa monoinsaturada protege de las afecciones cardiacas. Es una fuente de antioxidantes, como la vitamina E.

Se utiliza para preparar platos de verdura, salsas, ensaladas, para freír, y para la
conservación de los alimentos.
Alimentos vegetales: Las frutas, verduras y legumbres. El consumo de frutas y verduras frescas protegen de las enfermedades cardiacas, debido a los antioxidantes
que contienen. Los tomates en especial por su contenido en licopeno.
Pescado azul: El pescado, y en particular el pescado azul, como la sardina, es especialmente saludable. Son una fuente de grasas Omega-3, especialmente beneficiosas para tener un corazón sano y fuerte.
Vino, con moderación: el vino tinto contiene polifenoles, que son antioxidantes beneficiosos para el corazón. Se recomienda un máximos de vasos en el caso de los hombres y uno en el de las mujeres .
Frutos secos: contienen muchas proteínas, fibra vegetal y vitamina E, con efectos antioxidantes. Aportan grasas insaturadas que ayudan a controlar los niveles de colesterol en sangre. (tomar en pequeñas dosis porque son muy calóricos).
Harina: rica en fibra se utiliza en la preparación del pan, en la elaboración de pastas, cuscús .

Productos lácteos: excelentes fuentes de proteínas de alto valor biológico, de minerales (calcio, fósforo, potasio) y de vitaminas (vitamina A, D, riboflavina, ácido fólico y vitamina B12). El yogur proporciona microorganismos vivos que mejoran el equilibrio de la flora intestinal.