Pechuga de pollo con guarnición de cebolla caramelizada

Lo reconozco, y lo he comentado muchas veces que no hay nada que me aburra más que una pechuga de pollo asada. Esta vez hasta le hice una foto de
recuerdo:-).  Siempre pone a prueba mi creatividad porque me las veo y me las deseo para camuflarla y hacer inventos con ella. Además en verano, que es aún más difícil porque solo apetece comer cosas ligeras y con esta preparación objetivo alcanzado, rápido, barato y con una pechuga he tenido para tres.

Cebolla caramelizada con zanahorias

Ingredientes 
2 cebollas cortadas en juliana
2 cucharadas de azúcar moreno
6 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 chorrito de vino blanco
1 bolsa de zanahorias ralladas

Preparación
Pelamos las cebollas y las cortamos en juliana; reservamos.

Calentamos el aceite en una sartén y pochamos la cebolla a fuego medio bajo para que se vaya haciendo despacio.

Freímos las cebollas hasta que tomen un poco de color. Añadimos  las dos cucharadas de azúcar moreno y dejamos caramelizar unos 5 minutos cuidando que no se queme

Cuando el azúcar se haya derretido y esté almibarado añadimos la bolsa de zanahorias y el chorrito de vino blanco (medio vasito) y dejamos hacer removiendo a menudo hasta que el vino se haya evaporado.

Reservamos caliente

Fileteamos la pechuga y las salpimentamos.

Las pasamos vuelta y vuelta para que tomen color por la sartén en un poco de aceite al que habremos añadido un par de guindillas o salsa picante.

Sugerencias
La cebolla caramelizada es un buen acompañamiento siempre en los asados. Podemos rallar la zanahoria si nos apetece trabajar.
Ni que decir tiene que se puede hacer con pechuga a la plancha u otro tipo de carne
Otra opción es hervir en agua 1/2 kg. de zanahorias cortadas en rodajas. En la olla 10 minutos) escurrimos y las servimos mezcladas con la cebolla caramelizada. Aliñamos con un poco de vinagre de Módena. Es un buen entrante.

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