Tarta de canela

Esta tarta es un remake. Fue publicada en el año 2012 Pero como la repetimos creemos que está bien volverla a publicar
Un bizcocho  delicioso que degustamos todos en casa de mi hija  Susana que es la  que lo preparó y nos facilitó la receta.y que nos encantó a todos.
Aquí os lo traigo que seguro os va a gustar. Ideal para el verano pero que en invierno tampoco le vamos a hacer ascos.

Ingredientes
½ litro de nata
1 taza de leche entera
4 cucharadas de azúcar
15 hojas de gelatina
3 yemas
1 palito de vainilla
1 cucharada de maicena
18 bizcochos de soletilla
Canela en polvo
Almendras picadas

Almíbar Nº 1
6 cucharadas de Azúcar, agua y canela
Agua

Almíbar Nº 2
3 cucharadas de azúcar morena
1 cucharada de agua

Preparación
Batimos las yemas con el azúcar hasta que estén espumosas. Añadimos la maicena, la leche y removemos.
Calentamos medio vaso de nata con la vainilla y dejamos infusionar (lo podemos hacer en el micro) Retiramos la vaina y sacamos los granitos y se la agregamos a la nata. Añadimos la cucharadita de canela en polvo, removemos e incorporamos las hojas de gelatina removidas y escurridas. Volvemos a remover hasta que estén completamente disueltas y dejamos enfriar.

Montamos el resto de la nata y la incorporamos a la mezcla anterior cuando esta esté totalmente fría.
Remojamos los bizcochos en el almíbar Nº 1.
Cubrimos el fondo de un molde (preferiblemente desmoldable) con el almíbar Nº 2

Encima colocamos una capa de bizcochos remojados y cubrimos con la mitad de la crema. Cubrimos con otra capa de bizcochos y terminamos con  la crema.

(Dependiendo del tamaño del molde podemos poner una capa más terminando con la crema)
Una vez montado el pastel lo dejamos en el Frigo unas 6 horas.
Desmoldamos con cuidado y servimos espolvoreada de canela. En este caso no lo espolvoreamos porque no a todos nos gusta así que al que le apeteció se lo puso aparte

Se me ocurrió hacer un caramelo cristalizado para decorar la tarta que quedó nunca mejor dicho de dulce.

Ponemos un cazo a fuego mediano con el azúcar y unas gotas de limón. Dejamos que se vaya derritiendo sin remover, solo el recipiente cuidando de no quemarnos

Cuando el caramelo tenga un tono dorado lo ponemos sobre papel albal y con una cuchara de madera lo vamos extendiendo formando el encaje

María