Sopa fría de cerezas

Esta receta viene de Centro Europa. La comí en Hungría y me encantó. Se toma en verano y es muy refrescante. La he hecho algunas veces pero aún no tenía blog, ni esta afición de hacer recetas:-) Se toma como entrante o para cenar
Como no no podía ser de otra manera yo le he dado mi toque personal, la receta original no lleva manzana y he sustituido la corteza de limón por una rodaja de piña, y cambié la nata por queso Mascarpone que es realidad lo que marca la diferencia al hacerla más cremosa.
Opté por no incorporar cerezas enteras en la sopa. He preferido decorarlas con una brocheta de cerezas y unas hojitas de menta para darle color.

Ingredientes
500 gr. de cerezas
1 rodaja de piña
1 manzana descorazonada
2 cucharadas de azúcar
1 palito de vainilla
1 rama de canela
4-6 clavos
2 tazas de vino tinto
150 gr. de queso mascarpone
Agua

Preparación
Deshuesamos las cerezas ya lavadas. Que es el trabajo más ingrato. Reservamos una cuantas para decorar.

En una cazuela ponemos a hervir el agua, el vino junto con las especias (azúcar, canela, clavos) Cuando rompa a hervir dejamos unos 5 minutos antes de añadir las cerezas deshuesadas, la rodaja de piña y la manzana descorazonada..
Cocinamos el conjunto hasta que las cerezas estén tiernas.
Cuando se hayan enfriado retiramos los clavos, la canela y la vainilla.

Añadimos el queso mascarpone y pasamos el conjunto con la batidora y luego por el pasapurés para que no queden hollejos. Si nos queda muy espesa podemos añadir un poco de leche.

Lo guardamos en el frigo y lo servimos muy frío decorado con las  cerezas naturales y unas hojitas de menta o hierbabuena.